Generaciones del programa ICEC PUCV se reunieron en encuentro de comunidades de aprendizaje
Por Denisse Espinoza Ramos
“En esta segunda etapa que estamos viviendo, una vez ya finalizado los cursos, corresponde poder fortalecer el trabajo con las comunidades de aprendizaje. Hay dos grandes cohortes que a su vez tienen pequeñas comunidades, ya sea por comuna o colegios, y la idea hoy es reunir todos esos grupos de trabajo. ¿Por qué nos juntamos? Simplemente para cambiar la forma en que enseñamos Ciencia. Es importante hacerlo juntos y juntas porque así tendremos mayor alcance y podemos irnos acompañando en este proceso. Si uno está solo tratando de hacer cosas distintas, es difícil porque todo el sistema empuja a hacer lo tradicional, por eso es importante generar redes y acompañarse”, manifestó Corina González Weil, Directora del programa.
En la jornada estuve presente Marcelo Palacios, representante de la Secretaria Regional Ministerial de Educación. “Hay un paradigma que tenemos porque venimos de una misma escuela, por una rareza de país que se formó, en que estamos acostumbrados a ser individualistas, a salvarnos solos, pero hoy estamos invitados a trabajar en comunidad, a pensar en el otro. El llamado de esta reunión y el trabajo que vamos a comenzar hoy se centra en pensar en el otro. El sentido de este programa es ir más allá de sus establecimientos, de sus comunas. Lo bonito de esto tiene que ver con cómo vamos despertando a nuevas metodologías, al trabajo en el aula, pero también al compartir. Yo lo que más rescato es que están contentos porque están viendo una evidencia de su trabajo”, señaló.
El objetivo de este encuentro era que ambas cohortes se conocieran y comenzaran a planificar su trabajo como una gran comunidad de aprendizaje. Por ello, se realizaron durante el día una serie de actividades que les permitiera a los profesores relacionarse y compartir experiencias. De esta manera las conversaciones giraron en torno a identificar el estado del trabajo de cada comunidad de aprendizaje y sus proyecciones, reflexionando sobre las dificultades y oportunidades que presenta este tipo de trabajo.
Cecilia Mardones, profesora de la escuela Buen Pastor de San Felipe valoró poder reencontrar con otros profesores. “Nos alegró juntarnos con los colegas con que habíamos participado en el ICEC del segundo cohorte. Fue muy grato saber que esto no acabo el año pasado, no acabó en febrero, sino que va a continuar, que van a ir a nuestra escuela, que vamos a tener tiempo para reunirnos y vamos a poder seguir trabajando. Es grato saber que no pasa como otros cursos en que se termina el curso y se acaba el contacto. Acá vamos a poder seguir trabajando, vamos a integrarnos con la otra cohorte, vamos a participar en congresos y vamos a estar en contacto. Eso es lo que más contentos nos puso”, indicó.
“Voy a ser honesta, en primera instancia a mí nadie me consultó si quería participar en este programa, me dijeron vas a ir. Yo pensé que era algunos sábados y que era hasta las dos. Después me di cuenta que no era así. Ahora, que finalizó el curso, mi hija me dice ‘mamá, por fin te veo’. Pero de lo malo hay que sacar lo bueno, y yo aprendí mucho al pasar por ICEC, sobre todo a perder el miedo. A lo que yo mas temía era a sacar los niños a terrenos, a llevarlos a la práctica. Que los niños tocaran, se ensuciaran, que se pararan en clases, metieran bulla, se cambiaran de mesa, para mí eso era horroroso. Pero el miedo se va perdiendo y ver sus caritas de felicidad ha sido lo mejor. Hace poco tuvimos que exponer lo que hemos estado haciendo y los directores quedaron asombrados, por esas caritas, ellos son la mejor evidencia de lo que estamos haciendo”, contó Roxana Vergara, educadora de párvulos proveniente de Rinconada.
Por su parte, Pablo Calderón, profesor del Liceo Max Salas también se mostró entusiasmado por el trabajo venidero. “Estuvimos trabajando en una jornada que yo la tomo como un rencuentro y no solo los profesores del ICEC 2, sino que también los de la primera cohorte, que a partir de ahora vamos a ser un sólo grupo. Tenemos que trabajar en comunidad durante el año, van a haber muchas actividades, seguimiento, acompañamiento científico. La idea es que nosotros podamos fortalecer en los alumnos el desarrollo de habilidades del pensamiento científico, a través de las actividades que nosotros podamos realizar entre colegas, comunidades y escuelas. Hoy vamos a dejar listo el plan de trabajo, por lo tanto, me siento contento. De repente nos perdemos en el tiempo por nuestros trabajos, pero esto ha sido una buen momento para poder compartir y retomar las fuerzas para trabajar en lo que hemos planeado”, reveló.
Finalmente, Víctor Carreño, profesor del colegio España de San Antonio indicó que: “Esta es una instancia en que podemos volver a vernos, se establecieron lazos no sólo entre nosotros como colegas, sino también con nuestros profesores instructores, entonces es súper agradable volver a vernos, compartir, ver qué hemos hecho, en qué etapa estamos, y conocer también qué es lo que tiene proyectado para nosotros la Universidad y el Ministerio de educación. Creo que es una situación bastante particular y al final día esperamos irnos con nuevas metas”.